24 de abril de 2012

Homenaje al Estudiantes de Baloncesto. ¡Somos un equipo de patio de colegio!

Otros deportes - Opinión
Otros deportes - Noticias

Un poco de miedito
Temblaban las gradas supletorias sobre la pista de ciclismo del antiguo Palacio de los Deportes. No sé si esa pista era de madera, pero una década después ardió en llamas a toda host..
Moros con turbantes a mi alrededor, por todos sitios... Algarabía. Cánticos con lemas aguerridos cantados en grupo. Camisetas del Ché Guevara.
Un bocinazo, 00:00 en un eléctronico, tan viejo como ese Palacio. Abrazos. Gente histérica, casi llorando. Yo imbuido de esa alegría.
Eran dementes todos…
Justo en ese segundo (00:00), me arrastró la “marea demente”. Invasión de pista. Aunque no hubiera querido, la marea me arrastraba.. Y allí, abajo, un Oso casi llorando, un Cura extasiado y cientos de dementes, esta vez además locos...
Contado así, es una escena de Tim Burton, una paranoia de Kubrick o una indigestión de setas en algún coffee shop holandés…

Pero no. Aunque, en realidad, la alegría empezó unos segundos antes, cuando el jugador del equipo israelita Jamchi se resbaló y perdieron la bola, en el Palacio. El “limpiapistas” tuvo algo que ver en esa victoria: no había hecho su trabajo. ¡Mentira, lo había hecho muy bien!

Estudiantes (sin Asefas, sin Adeccos, sin marcas… simplemente eso: el Estu) se había clasificado para la Final Four de Estambul tras derrotar al Maccabi Tel Aviv. Doce mil personas: todas tan histéricas como las de ese fondo.

Invasión de pista. Aunque no hubiera querido, la “marea demente” me arrastraba.. Un Oso casi llorando, Orenga feliz y agotado. Y me encontré de en frente con un chico joven, de pelo corto, pero bastante rizado; rodeado de gente, pero me chocó la mano: Alberto Herreros. Era imposible llegar a la mano que yo quería, la del mítico Ricky Winslow (con ese nombre además: jugador de baloncesto, seguro…)


La actividad extraescolar de un colegio de Madrid estaba en la élite europea de una competición profesional.>


Fue fundado en el año 1948. En el curso 1947-48, un grupo de alumnos del Instituto Ramiro de Maeztu inscribió en la Federación Castellana de baloncesto un equipo con el nombre "Ramiro de Maeztu" en tercera división, y un año más tarde, en el curso 1948-49 se constituyó formalmente el "Estudiantes", bajo los auspicios y el apoyo decisivo de Antonio Magariños, catedrático y jefe de estudios del Instituto, y se inscribieron con ese nombre dos equipos. Antonio Magariños fue el primer presidente del club.

Jugando en las canchas de dicho instituto, con gran número de equipos de todas las categorías desde alevines a juniors, la cantera del club ha dado como fruto durante toda su historia muchos grandes jugadores y entrenadores del baloncesto español. Entre los jugadores se puede mencionar a Fernando Martín, Alberto Herreros, Carlos Jiménez, Felipe Reyes, Sergio Rodríguez, Antonio Díaz-Miguel, Aíto García Reneses, Jesús Codina, Vicente Ramos, Juan Antonio Martínez Arroyo, Gonzalo Sagi-Vela, Vicente Gil o Nacho Azofra. Entre los entrenadores puede citarse a José Vicente Hernández (más conocido como Pepu Hernández) además de los ya citados Antonio Díaz-Miguel y Aíto García Reneses.

(vale, los 2 últimos párrafos copiados de la Wikipedia, pero os he ahorrado buscarlo. Aquí lo tenéis: http://es.wikipedia.org/wiki/Club_Baloncesto_Estudiantes )

Yo tenía amigos en el Ramiro, que jugaban en el Estu Cadetes C ó D (ó quizás era Z, a mi me parecían muy buenos), y había jugado en esas canchas… Incluso me había jugado algún triple en el mítico Magariños: Reducto “rojo” en plena calle Serrano. Yo por aquel entonces también “era rojo”, sigo creyendo que lo soy, pero ya “de palo” (según mi hermana).

Pero era del Madrid de basket –inercias del fútbol-, aunque esa noche, en el viejo Palacio, me encontré cantando “¿Dónde están? No se ven… ¡ni merengues, ni culés!”…
Siempre me encantó ese equipo, tenía algo “romántico”

Ahora está pasando un mal trago. Se acerca al infierno LEB, pero siempre hay que confiar en ellos, a muerte. ¡Locos como dementes! Y nunca les olvidemos, Estudiantes siempre es al final un hermoso ave fénix azul y negro.


Esa noche me fui a la cama, contento como un niño (aún lo era, 15 añitos) con una cancioncita que no dejaba de repetirse en mi cabeza –al ritmo de “Las Muñecas de Famosa”-:

Los dementes del Ramiro se dirigen a Estambul
para ver al Estudiantes arrasar la final four
y el cura desde el banquillo
les bendice porque es un pillo
saquemos todos la verga
que esta noche hay una fiesta
vamos a echarle cojones
y este año, campeones



PD: Ese año, 1992, se dio uno de los momentos cumbres de la historia del baloncesto en este país. Dos clubes ejemplares, dos clubes de cantera representaron al baloncesto español en la Final Four. Uno catalán y otro madrileño y no eran ni Barça ni Madrid.

En el play-off de cuartos, La penya eliminó a la Cibona en dos partidos, el Estudiantes al Maccabi en tres, el Philips al Barça en dos y el Partizán al Knorr de Bolinia en 3 apretadísimos partidos.

Luego en la Final Four el Estu fue barrido tanto en semifinales por el Joventut como por el Philips en el partido de consolación.

Pese al extraordinario subcampeonato liguero del año pasado, sigo considerando que aquella campaña (91/92) sigue siendo la mejor de la temporada del Estudiantes: fueron campeones de Copa, se metieron en la Final Four y forzaron el quinto partido de las semifinales ACB, quedando terceros en la clasificación final.
Después quedó subcampeón de Korac, campeón de Copa y mil-veces semifinalista de la Liga ACB.. Llegó el enorme Rafa Vecina, el segundo Reyes y Suárez (amado primero y luego odiado, como aquel chico de pelo rizado). Hasta “el filo de la navaja” de hoy…

Escrito por: Carlos López Vivas.
¡Compártelo en tus redes sociales!